Al fin y al cabo llegue hasta aquí,
hoy.
Entendí internamente que nada tenía
que hacer… que comenzar algo ahora, es ver mi interior… como exterior.
Pensando, escuchando… estando atenta
a las señales, llegue a esta certeza: solo seguir con mis propios proyectos,
sin desalentarme, sin darle espacio al menosprecio estúpido de cualquier
postor.
Sin ánimo de ofender, y a la vez sin ganas,
ya, de seguir obedeciendo, decidí y percibí mis posturas, como mías. Entonces
como tales, las voy a ir puliendo, observando en la práctica hacia donde las
voy a dirigir, de ahora en más.
Dentro de las intuiciones que
encontré, hoy… solo hoy, hay una que la siento válida, ya que coincide con las
palabras de Jung, cuando él explica que cualquiera se adjudica el saber algo
acerca de psicología , por ejemplo, y él
se vería obligado a aclarar, en principio, que no todo se puede pasar por la
conciencia.
Claro, llevo varios años y no sé si
décadas, estudiando y absorbiendo todo lo que a mi alcance estuvo. Por esto
mismo, quizá nombre las cosas de una forma un tanto arbitraria, tendenciosa y
hasta ingenua. Todo este combo, en realidad es pura expresión de mi persona, y si…
no me importa ocultarlo.
Ni Jung ocultó sus límites… para
que ocultar, yo, mi tendencia,
empedernida y hasta obsesiva acerca del inconsciente, de la sombra, del espejo
de cada una de las acciones, actitudes, ideas… tendencias que experimento en
todo momento.
Durante estos años, me relacioné con
personas, a las que luego de un tiempo prudente, y quizá ni tanto, mostré mis
ideas, mis ayudas estructurales, mis hilos de Ariadna… para introducirme o
quizá ir caminando en un sendero, digamos acorde a mi… y no ajeno.
Aquellos que lograron verme… se
llevaron lo que generosamente ofrecí, ideas, tendencias, explicaciones… allí
donde solo había perplejidad, cada uno siguió su rumbo.
El camino del héroe, la percepción,
los descensos femeninos, el espejo, la física cuántica, el prana, la variación
eidética husserliana, los campos mórficos, los mundos internos y externos, los
niveles de conciencia
de “Ver frac-tal”, el “Mundo Desconocido”, “Tu propio camino”… muchas manos he
tomado, y las he trasmitido generosamente.
Atravesé los
desiertos de la biblia de la mano de Corbera, interioricé en las formas
filosóficas desde Antonio Blay Fondcuberta, Deepack Chopra me abrió el camino
desde el deseo…